Secretos robados CIA y FBI, un niño inglés en juicio

Kane Gamble de 15 años, inglés, en estos días de juicio en Londres, su historia parece una película y tal vez lo sea. Desde Leicester, desde su pequeña habitación ingresó a los sistemas ultrasecretos de la CIA y el FBI. Desde junio de 2015 hasta febrero de 2016, Ken logró robar contraseñas, información sobre la privacidad de los 007, detalles de seguridad e incluso información sobre operaciones encubiertas de Estados Unidos en Afganistán e Irak. ¿Cómo? Utilizando una técnica muy común entre los hackers, la 'ingeniería social', que consiste en fingir ser de otra persona, en el caso de Ken primero empleado de la compañía telefónica Verizon, luego directamente jefe de la CIA, y convencer a las personas con las que se ponen en contacto para brindarle toda la información que solicite. Tan simple como desarmar. Sobre todo porque desde la casa del consejo donde vive con su madre Ken ha decidido apuntar a las piezas más importantes de la agencia y los servicios estadounidenses: además de Brennan, el adjunto del FBI Mark Giuliano, el entonces secretario de seguridad. Jeh Johnson y el director de inteligencia nacional de Barack Obama, James Clapper. Todos los secretos pirateados fueron luego utilizados por el joven de 15 años para perseguir a sus víctimas y sus familias. Durante meses los ha bombardeado con mensajes y llamadas, descargado imágenes pornográficas en sus computadoras y revisado sus tabletas y televisores. Incluso logró acceder al iPad de la esposa de Brennan y al correo electrónico de Clapper. Amenazó a Johnson, por teléfono, "con violar a su hija". "Tenía a estas personas en sus manos y jugaba para hacerles la vida un infierno", explicó el juez al Old Bailey de Londres. Parte de la información fue publicada en Twitter, donde el niño se jactaba de haber cometido la "mayor violación cibernética", otras en el sitio del grupo pro palestino 'Crackas With Attitude' que fundó en 2015. Ken, quien tiene que responder de diez cargos, fue sometido a un examen psiquiátrico y para los médicos sufre una forma de autismo. Fue arrestado por la policía británica en febrero de 2016 después de que el FBI descubriera la violación y ya había robado los datos personales de 20.000 empleados de la Oficina.

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