🎤La inteligencia artificial predice el riesgo cardíaco

   

(por Giovanni Calcerano) Los científicos de Google y su subsidiaria de tecnología de la salud Verily, utilizando inteligencia artificial y software de aprendizaje automático, han identificado una nueva forma de evaluar el riesgo de enfermedad cardíaca. Específicamente, se creó un sistema que, al analizar las exploraciones del fondo de ojo de un paciente, es capaz de deducir con precisión ciertos datos, incluida la edad, la presión arterial y el consumo de tabaco o no. Utilizando estos datos, y cruzándolos con una base de datos de información médica, el sistema es capaz de predecir el riesgo de daño cardiovascular con más o menos la misma precisión que los métodos actuales.

Si bien la idea de analizar los ojos para juzgar la salud del corazón parece inusual, se inspira en un cuerpo de investigación bien establecido. La parte posterior del ojo, de hecho, está llena de vasos sanguíneos que reflejan la salud general del cuerpo. Claramente, el uso de dicho software hace que sea más fácil y rápido para los médicos analizar los problemas cardíacos de un paciente, ya que no requiere un análisis de sangre. Pero el método tendrá que probarse más antes de que pueda usarse en el entorno clínico.

Para entrenar el sistema, los científicos de Google y Verily utilizaron un conjunto de datos, que incluían exámenes oculares e información médica general relacionada, de pacientes con 300.000. Las redes neuronales se usaron luego para definir una serie de patrones estándar y para asociar signos de detectores específicos presentes en las exploraciones con los valores correspondientes útiles para determinar el riesgo cardiovascular (por ejemplo, edad y presión arterial).

Durante la fase de presentación, se mostró al sistema, en secuencia, una serie de pares de imágenes retinianas, una de las cuales estaba relacionada con un paciente que sufrió un evento cardiovascular en los siguientes cinco años y la otra no. El algoritmo de Google pudo identificar al paciente en riesgo en el 70% de los casos. Este valor es solo un poco peor que el método SCORE comúnmente utilizado para predecir el riesgo cardiovascular, que requiere un análisis de sangre y proporciona un 72% de predicciones correctas.

Alun Hughes, profesor de fisiología y farmacología cardiovascular en la UCL en Londres, dijo que encontró el enfoque de Google absolutamente creíble debido a la "larga historia de observar la retina para predecir el riesgo cardiovascular".

Para Google, el trabajo es más que una forma de estudiar los problemas cardíacos. En cambio, representa el nuevo camino en el que avanzar para ayudar y dirigir la investigación científica. De hecho, aunque la mayoría de los algoritmos médicos actuales están diseñados para replicar las herramientas de diagnóstico existentes (como la identificación del cáncer de piel, por ejemplo), este algoritmo aprovecha nuevas formas de analizar los datos médicos existentes. Por lo tanto, a partir de bases de datos particularmente grandes que contengan información detallada sobre enfermedades y pacientes, se podrían crear sistemas que puedan analizar situaciones concretas específicas. Por ahora, la hipótesis de un médico "artificial" que realice nuevos diagnósticos sin supervisión humana es una perspectiva lejana en el futuro, pero la investigación de Google sugiere que la idea no es completamente descabellada.