Pequeños drones armados, los "Hunter Killers", Trump quiere venderlos en todo el mundo y no solo a sus aliados

   

(por Massimiliano D'Elia) El presidente Donald Trump está trabajando para facilitar la exportación de ciertos tipos de armas letales como los pequeños drones. Trump ha decidido acelerar las regulaciones que regulan el comercio de armas no tripuladas, porque está sensibilizado por los productores estadounidenses que, según ellos, sufrirían la competencia global de chinos e israelíes que adoptan regulaciones más ágiles en la materia.

La Casa Blanca al promover la consigna de "compra estadounidense" para crear nuevos puestos de trabajo y reducir el déficit comercial de Estados Unidos, irá, en esta ocasión, en contra de las normas y acuerdos internacionales en materia de derechos humanos y la voluntad de las asociaciones por la control de armas. Para ir en esta dirección, Trump advierte cada vez más al país sobre la violencia y la inestabilidad en regiones como Oriente Medio y el sur de Asia.

La nueva política de exportación de armas estuvo bloqueada durante meses, a pesar de los impulsos del secretario de Defensa, Jim Mattis, y las indicaciones del asesor de seguridad McMaster, quien se quejó de la agresión comercial de algunos países de ultramar.

El mercado emergente de aviones militares no tripulados es el de Hunter-killers, máquinas que transportan menos misiles y viajan distancias más cortas, en comparación con modelos más grandes como el icónico Predator.

Algunas fuentes anónimas han informado que la nueva política de liberalización se extenderá luego a drones de todos los tamaños. Trump está dispuesto a expandir la venta no solo a los aliados. La guerra moderna está cada vez más orientada al uso de sistemas de armas "no tripulados" y Estados Unidos no quiere quedarse atrás de sus competidores globales.

La idea inicial de Trump era la venta de modelos de drones para ser usados ​​solo para monitoreo y focalización, pero era necesario expandir la oferta también con modelos armados. Una lista de compradores potenciales ya está casi definida e incluye miembros de la OTAN, Arabia Saudita, otros países socios del Golfo, Japón y Corea del Sur. Se está estudiando para permitir adquisiciones también a socios regionales estratégicos como el India, Singapur y Australia. Hasta la fecha, los únicos drones armados de Estados Unidos se han vendido a Gran Bretaña e Italia, pero estamos trabajando para que la tecnología se venda en todo el mundo, dijo una fuente anónima a Reuters. “Era una contradicción que un aliado nuestro pudiera comprar esta tecnología militar a otro país y no a nosotros, afectando así nuestro poder comercial e industrial. Un funcionario de la administración Trump informó que el gobierno de Estados Unidos estaba acelerando las regulaciones para agilizar la burocracia comercial en todo el sector aeroespacial, precisamente para luchar contra la competencia internacional en igualdad de condiciones.

Pero, ¿quién se beneficiará más del nuevo rumbo que quiere tomar la administración Trump?

Textron y Kratos Defense & Security Solutions Inc, actualmente cubren el mercado de drones armados pequeños a nivel internacional, aunque las regulaciones estadounidenses actuales tienen ventas limitadas hasta ahora.

A la luz de las noticias, la compañía está pensando en aumentar la producción del producto. La nueva legislación en cuestión, sin embargo, también favorecería a los grandes nombres del sector como Boeing, Northrop Grumman, General Atomics y Lockheed Martin.

Se espera que el pequeño dron armado para exportación planetaria sea un poco menos costoso que los de gama alta como Predator y Reaper, alrededor de 17 millones de euros, y será menos destructivo que los drones más grandes. La potencia de fuego puede destruir vehículos, estructuras pequeñas y pequeñas posiciones armadas. Un uso puramente urbano y más quirúrgico.

Los funcionarios estadounidenses dicen que exportar sistemas de armas más optimizados está en línea con las promesas electorales de Trump, donde prometió fortalecer la industria de defensa y hacer que los socios extranjeros paguen más por su defensa. El aumento de las ventas de estos pequeños drones "podría poner estas armas en manos de los gobiernos equivocados que podrían usarlas contra sus vecinos o controlar su propia población", advirtió Jeff Abramson, un senior de la asociación de control de armas. El ex presidente Barack Obama también introdujo reglas en 2015 para aumentar las exportaciones de drones militares, pero los fabricantes se quejaron de que todavía eran demasiado restrictivos.

Se espera que el nuevo proyecto de política de armas se presente en las próximas semanas. Entre los cambios más sustanciales estará una aplicación más suave de la regla de "presunción de negación". Esta regla ha visto muchas ventas denegadas en el pasado por razones y reglas de derecho internacional.

El MTCR un acuerdo de 1987 para el control de armas, firmado por Estados Unidos y otros 34 países donde se requieren estrictos controles de exportación de armas similares a drones, como el Predator, que las clasifica como armas de categoría 1, aquellas con una carga útil de más de 1,100 libras ( 500 kg). La administración Trump también intentará renegociar este acuerdo para incentivar la exportación de grandes drones armados, producidos en EEUU.