Belgrado - Tras el arresto de 13 policías de etnia serbia en el norte de Kosovo, Aleksandar Vucic puso al ejército y a las fuerzas policiales en alerta máxima y convocó una reunión urgente del Consejo de Seguridad Nacional para examinar la situación de alta tensión creada en el país.
Según los informes de los medios de comunicación, Vucic emitió una advertencia a la UE que declara que Serbia reaccionará si las fuerzas especiales de la policía de Kosovo (Rosu) no se retiran del norte de Kosovo.
En Kosovska Mitrovica se cerró el puente sobre el río Ibar, que separa el sector norte (serbio) del sector sur (albanés). La KFOR ha fortalecido su presencia, mientras que las sirenas de alarma resonaron esta mañana, con grupos de serbios reunidos en la plaza principal del norte de Mitrovica.
Milovan Drecun, jefe de la comisión parlamentaria para Kosovo, hablando en Belgrado, declaró: "Nuestros mensajes de paz responden con mensajes de guerra", destacando cómo está claro que la parte kosovar ya no busca ningún diálogo y el objetivo de tales provocaciones. Sería llegar a enfrentamientos con la población serbia para provocar una intervención armada por parte de Serbia.