Conferencia en Mónaco, EE. UU. No confía en China y hace las paces con los telebanes

"Es esencial que nosotros, como comunidad internacional, nos demos cuenta de los desafíos que plantea la manipulación china", dijo el secretario de Defensa de Estados Unidos. Marcos Esper,  en Munich durante la conferencia internacional de seguridad. Esper instó luego a los líderes de seguridad mundial a "despertar" y prestar más atención a los esfuerzos de China para influir en la economía mundial.

El oficial de Defensa de Estados Unidos destacó que Estados Unidos no busca conflictos con China, pero expresa preocupación por lo que ha dicho China, que es modernizar sus sistemas militares para 2035 y dominar Asia para 2049.

Luego, Esper acusó a China de estar cada vez más involucrada en negocios en Europa y en otros lugares más allá de sus fronteras con la intención de buscar ventajas por cualquier medio y a cualquier costo.

El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, dijo en respuesta que Esper y el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, habían estado mintiendo, acusando a China de usar una "estrategia maliciosa" con respecto, por ejemplo, a la tecnología 5G de Huawei.

De hecho, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, había declarado: "No podemos dejar pasar información por redes en las que no confiamos, es inaceptable".

Wang dijo que "Estados Unidos no quiere el rápido desarrollo y rejuvenecimiento de China" y, sobre todo, no le gusta "el éxito de un país socialista". Wang dijo, sin embargo, que es "muy importante" que las dos superpotencias inicien conversaciones para "encontrar una manera de vivir en armonía e interactuar en paz".

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo en la Conferencia de Seguridad de Munich que China presenta tanto desafíos como oportunidades para Occidente. Dijo que Estados Unidos y Europa deben acordar un enfoque unificado para abordar la creciente influencia global de China.

Esper intentó obtener apoyo europeo para luchar contra la competencia de Huawei después de que Gran Bretaña decidiera hace semanas usar la tecnología 5G de Huawei. La decisión de Gran Bretaña asestó un duro golpe a los esfuerzos de Estados Unidos para persuadir a los aliados de que excluyan a Huawei de sus redes, argumentando que China podría usar 5G para espiar, una acusación que Huawei y los funcionarios chinos han negado constantemente.

Estamos alentando a las empresas de tecnología aliadas y estadounidenses a desarrollar soluciones 5G alternativas y estamos trabajando junto a ellas para probar estas tecnologías en nuestras bases militares. Esper también habló sobre la guerra en Afganistán y dijo que un acuerdo de Estados Unidos con los talibanes que podría resultar en la retirada de las tropas estadounidenses no está exento de riesgos, pero "parece muy prometedor".

Las declaraciones de Esper se produjeron un día después de que un alto funcionario estadounidense dijera que se había alcanzado un acuerdo de alto el fuego de siete días con los talibanes.

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