Hariri, ex primer ministro libanés, acepta la invitación de Macron y se va a París

   

Saad Hariri, quien anunció su renuncia como primer ministro de Líbano en noviembre pasado, aceptó la invitación de París.

Sin embargo, no se comunicó la fecha de llegada. Mientras tanto, el presidente libanés Michel Aoun habría anunciado su llegada a la capital francesa el sábado, en vista de una corta estadía unos días antes de regresar a Beirut.

Hariri ha estado al frente de un gobierno de unidad desde diciembre de 2016, después de dos años de vacío en la presidencia y, en consecuencia, en todo el espectro parlamentario. Su renuncia generó tensiones entre Riad y Teherán. Incluso hoy en día, el canciller saudí Adel Jubeir ha definido al grupo chiíta libanés como un "terrorista" y un instrumento de Irán para "imponer su dominio" en el país.

Mientras tanto, el canciller francés Jean-Yves Le Drian llegó a Riad durante la noche, para intentar mediar en la crisis política desencadenada por el anuncio de su renuncia. En rueda de prensa, confirmó que Hariri aceptó la invitación que ayer le hizo el presidente Emmanuel Macron a él y su familia, reiterando que el político libanés será recibido como un "amigo".

El primer ministro residió entre París y Riad entre 2005 y 2016, tras el asesinato de su padre Rafiq Hariri, quien también fue primer ministro en un atentado el 14 de febrero de 2005. Cinco miembros del grupo chií Hezbollah están siendo juzgados por el asesinato. , hasta hace dos semanas aliado al gobierno liderado por Saad Hariri.

Mientras tanto, este último permanece en Riad y no ha explicado las razones por las que permanece en la ciudad. Aoun calificó esta estancia como "inaceptable". En los últimos días, el primer ministro saliente ha prometido en varias ocasiones regresar a Beirut, asegurando que no será detenido como han denunciado el propio presidente libanés y otros políticos del país.

Por su parte, el gobierno saudí ha asegurado que Hariri "puede irse cuando quiera", dijo el canciller, hablando junto a Le Drian.

Jubeir rechazó las acusaciones de Aoun, calificándolas de "infundadas" y señalando que Hariri, que también tiene la nacionalidad saudí, permaneció en Riad por su propia voluntad.

El anuncio del viaje a París fue bien recibido en Beirut, donde Aoun dijo que podría ser el paso decisivo para poner fin a la crisis política.

"Esperamos que la crisis haya terminado y se haya abierto la puerta a una solución", dijo frente a los periodistas. Sin embargo, el mandatario, que aún no ha aceptado su renuncia, agregó que aguarda su regreso a Beirut para comprender cuáles serán los próximos pasos.

El factor decisivo, según Aoun, será entender qué razones llevaron a Hariri a irse a Riad y querer dimitir. Al anunciar su renuncia, el primer ministro habló de amenazas a su vida y criticó a Irán por su interferencia en la política libanesa y regional.