Ilaria, víctima de Ciberacoso y Porno Venganza, cuenta de sí misma en el libro "Todo lo que soy"

Ilaria: "Esas fotos difunden sin mi consentimiento, los silbidos, el acoso, los comentarios burlones en la calle. Ya nada era igual que antes: me había convertido en lo que decían que era”.

El treintañero ilaria di roberto vive en Cori en la provincia de Latina y ha sido víctima de ciberbullying e venganza porno pero también mucho más. Escuchada por nuestra redacción, en unos minutos destacó lo que falla en nuestro sistema en referencia a la violencia de género, señalando que existe una burocracia lenta y perjudicial (la mujer que presenta la denuncia no debe ser objeto de de una investigación) y que el problema es también y sobre todo de nivel sociocultural. Se necesitarían hogares familiares para los violentos y no para los que han sufrido violencia. Necesitamos, argumenta Ilaria, el endurecimiento de las leyes e iniciativas concretas y efectivas para llevar a cabo una correcta educación en igualdad de género en las escuelas, en los lugares de trabajo y en el seno de las mismas familias donde todavía vivimos en una jerarquía patriarcal y donde la violencia contra las mujeres y la más débil es a menudo perpetrado inconscientemente. La violencia, insiste en precisar Ilaria, no es sólo violencia física sino también verbal y social (Ilaria recuerda a Margaret Lazarus que en 1975 ya hablaba de "cultura de la violación"-cultura de la violación-): formas de violencia no física y quizás más peligrosas porque te destruyen lentamente desde dentro.

Ilaria contiene la sustancia de su denuncia en un pensamiento"No son las mujeres las que tienen que protegerse o tienen que evitar sino que es el hombre el que no tiene que perpetuar más violencia en perjuicio de una mujer”.

Todo lo que soy

Víctima de Cyberbullying y Venganza Porno e invitada en varios programas de televisión ilaria di roberto afronta la situación dramática que vivió poniéndola al servicio no sólo de su renacimiento, sino de todas aquellas voces que aún se encuentran aplastadas por el peso de estas vivencias dramáticas y completamente inauditas. Un mensaje, el suyo, que no sólo es "personal" sino que es capaz de implicar a todos, que debe hacerlo, ya que sólo afrontando con seriedad estas situaciones se podrá salir de ella y evitar que muchos otros sufran y queden desolados.

En la opciónTodo lo que soy“Ilaria cuenta su historia: desde los trastornos alimentarios, la dismorfofobia, la violencia y la batalla legal, hasta la psicoterapia, la culpabilización de las víctimas y el descubrimiento esclarecedor del feminismo, pasando por su relación con la escritura y el baile, relámpagos iluminados de niña. Construido en un estilo original, un mosaico de poemas mínimos estilo haiku, reflexiones, páginas autobiográficas y narrativas emocionalmente impactantes, el libro es una larga confianza sin filtrar.

Ilaria es una voz verdadera y se desnuda con coraje y orgullo en su turbulento camino de ex sirvienta a mujer libre. La obra es una autopsia de la violencia a la vez que una denuncia social que destila intensidad, conmueve, toca cuerdas dolorosas, a veces de forma salvaje y persuasiva.. Pero no es una lectura pesada, ni mucho menos: el autor suele ejercer el sarcasmo, bromear sobre el eterno choque entre machos y hembras y divirtiéndose pavimentando la muestra completa de incel, misóginos con los que toda chica tiene que lidiar a diario.

"Todo lo que soy”Es el intento de elaborar un dolor retenido por demasiado tiempo y al mismo tiempo la reivindicación y redención de una identidad defraudada, violada y aniquilada por la brutalidad de una milenaria hegemonía patriarcal. Es la manifestación identitaria de toda mujer que ha experimentado en su propia piel -directa o indirectamente- el efluvio de una violencia que no deja huella ni escapatoria. Es el testimonio de la indemostrabilidad de un mal invisible que nunca ha sido suficientemente destripado y la mayoría de las veces mantenido a raya ante un eventual (pre)juicio. Es el punto de llegada, pero también de partida, donde todo muere, nace y se renueva. Pero sobre todo es la demostración plausible de que no todo mal llega a dañar y que, muchas veces, un dolor tan grande e invasivo puede asumir un papel funcional si es atravesado, reelaborado y puesto al servicio de la comunidad.

"Todo lo que soy”Es un faro de luz, pero también un viaje a través de las propias zonas de sombra, dentro de esos pensamientos que no le contamos a nadie. Es un grito potente -que hace partícipes a sus lectores de un dolor desolador- y al mismo tiempo un leve susurro, no destinado a atenuar las peripecias del autor, sino como expresión de fuerza y ​​coraje en la férrea voluntad de reafirmarse - ya no como víctima, sino como mujer / sobreviviente - y recuperar la libertad de vivir sin cadenas, siguiendo los propios sueños.

Publicado por Ediciones Europa, el libro trae consigo muchas buenas intenciones, como la de romper -junto con los clichés sociales y los estereotipos de género- el guión que suele aplicarse a las víctimas de la violencia. Guiones mediáticos que en su insolencia falocéntrica no sólo delegan en las mujeres la responsabilidad de la prevención, sino que les exigen permanecer confinadas a su propio dolor, alejadas de cualquier posibilidad remota de renacimiento y venganza. Decepcionando toda expectativa o condicionamiento social impuesto a la mujer, Ilaria Di Roberto intenta ilustrar un lado diferente de la víctima, en una lucha contra la cultura de la violación y la del dolor.

"Todo lo que séno" es resiliencia, reactividad, rebeldía. Es el grito explosivo de los que sobreviven, pero no cesan en su lucha. Es el intento desesperado de desnudarse - metafóricamente por supuesto - en presencia de aquellas a las que la autora amablemente llama "hermanas", seguras de que esta vez, las heridas que se infligirán ya no dolerán tanto.

No hasta el punto de matarla..

Ilaria, víctima de Ciberacoso y Porno Venganza, cuenta de sí misma en el libro "Todo lo que soy"