Inteligencia artificial y aprendizaje

(por Andrea Pisaniello - Diseñadora instruccional / especialista en e-learning, Observatorio de Educación Digital AIDR)

"La IA tiene el potencial de generar un cambio enorme y beneficioso en la educación, pero solo si usamos nuestra inteligencia humana para diseñar las mejores soluciones a los problemas más urgentes de la educación". Romero Luckin

Con la pandemia del COVID-19, los sistemas educativos se encontraron en la posición de tener que reconvertir sus modelos pedagógicos tradicionales implementándolos con diferentes modelos de educación a distancia, en los que las nuevas tecnologías son determinantes. Esta crisis ha provocado cambios sustanciales en el ámbito educativo, se ha producido una rápida migración hacia modelos de aprendizaje virtual. Los profesores se enfrentaron a la difícil tarea de garantizar la continuidad educativa de los estudiantes. La inteligencia artificial (IA) puede ser un soporte pedagógico perfecto para simplificar algunas actividades dirigidas a los estudiantes. La inteligencia artificial, en su sentido más natural, simula las capacidades intelectuales del cerebro humano, por lo que la inteligencia artificial es aplicable a todas aquellas actividades que requieran interacción, por lo que sus aplicaciones pueden contribuir enormemente al campo de la educación.

Se han identificado varios beneficios que la IA puede aportar al sistema educativo:

• individualizar y personalizar el aprendizaje de los estudiantes

A través del análisis de datos realizado a través del software de IA, los profesores tendrán la oportunidad de preparar planes de estudio personalizados para cada alumno.

• mayor inclusión para los estudiantes con discapacidades de aprendizaje

• mayores garantías de acceso universal para todos los alumnos

Las herramientas de inteligencia artificial pueden hacer que las lecciones y las aulas sean globales, los estudiantes de diferentes idiomas o los estudiantes con problemas de visión y audición pueden participar. Actualmente se utilizan plug-ins o software que crean subtítulos en tiempo real durante la explicación del profesor.

• apoyo en la evaluación

El mundo educativo debe mirar hacia el futuro en el uso de tecnologías en el aprendizaje, con el fin de mejorar la efectividad de los docentes para maximizar el potencial de los estudiantes.

El alumno se ha convertido en el centro del proceso de enseñanza-aprendizaje, concebido como un proceso en el que se desarrollan competencias, entendidas como la integración de conocimientos, habilidades y valores. La inteligencia artificial, a través de sus diversos componentes, puede crear, desarrollar e incluso enseñar a los estudiantes conocimientos y habilidades. Cada día esta posibilidad se verá reforzada por el impetuoso proceso de convergencia entre tecnologías y conocimientos.

Lo que nos interesa es cómo podemos aplicar esta tecnología en la educación. En el ámbito educativo esta tecnología aún no está muy explotada pero podemos encontrar varios ejemplos de uso:

• En el aprendizaje de idiomas.

Consiste en utilizar la corrección de las respuestas para mejorar la retroalimentación en los errores a las respuestas con el fin de reforzar el aprendizaje del alumno durante sus errores. De esta forma, el usuario no solo es evaluado por sus aciertos, sino que también aprende de sus errores.

• ChatBot de soporte de información universitaria.

Consiste en una inteligencia artificial útil para resolver las dudas que puedan tener los usuarios sobre horarios, documentación e inscripción a actividades o exámenes.

Beneficios de la IA en la educación

Esta nueva tecnología puede traer varias ventajas en cuanto a la evolución de la formación, ya que pasará de una educación genérica configurada de la misma manera para todos los perfiles a una educación personalizada a medida del alumno.

Análisis de datos de estudiantes

La inteligencia artificial se puede utilizar para analizar esa masa de datos de cada alumno como individuo y como grupo para decidir qué metodologías o herramientas se deben utilizar con cada grupo y con cada alumno y cuáles son los procesos de aprendizaje más eficientes.

Se podría poner fin a las tareas repetitivas que se administran a los alumnos mediante la administración de actividades más específicas e individuales.

Mediante el análisis de datos se puede fomentar el aprendizaje colaborativo ya que será posible crear grupos similares para realizar actividades, aumentando la efectividad del aprendizaje. La inteligencia artificial podrá estudiar las habilidades de cada alumno y crear grupos con alumnos que tengan las mismas dificultades o carencias, mediante la comparación y el trabajo en grupo se superarán las dificultades con mayor facilidad.

Las ventajas de aplicar la Inteligencia Artificial son múltiples. De hecho, son tantos que podrían marcar un antes y un después en la evolución de la docencia.

El objetivo principal es incentivar a los docentes e instituciones educativas a aprovechar las ventajas de la IA para estructurar asistentes pedagógicos virtuales que ayuden a resolver la mayoría de las preocupaciones de los estudiantes. Los docentes deben estar capacitados para utilizar herramientas competitivas y funcionales, que apoyen y acompañen el aprendizaje de los estudiantes en un contexto de comunicación constante.

No es difícil concluir que así como la sociedad y la tecnología avanzan, la educación debe hacerlo a la misma velocidad. La IA ofrecerá amplias oportunidades para el mundo de la educación, manteniendo siempre como figura central la del docente, quien deberá definir problemas y objetivos, para diseñar el sistema de IA que mejor se adapte a las necesidades.

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