El Departamento de Justicia de Estados Unidos y la Agencia Central de Inteligencia podrían intervenir en un caso civil que involucre a un espía saudí en el exilio contra el Príncipe Heredero de Arabia Saudita Mohammed bin Salman. En una demanda de 106 páginas presentada el año pasado en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en Washington, DC, el Dr. Saad al Jabri afirma que el gobernante de Arabia Saudita, el príncipe Mohammed bin Salman, ha enviado miembros de su "grupo mercenario personal", conocido como Escuadrón tigre, en América del Norte, para asesinarlo.
Al-Jabri formó parte de la corte del príncipe Muhammad bin Nayef, nieto del monarca fundador de Arabia Saudita, el rey Abdulaziz. Bin Nayef, quien fue visto como el próximo rey de Arabia Saudita, nombró a al-Jabri como ministro de Estado y su asesor para asuntos de seguridad e inteligencia.

La posición de Al-Jabri cambió repentinamente en 2015 cuando murió el rey Abdullah y fue sucedido por el rey Salman. Luego, Salman nombró a su hijo, Mohammed bin Salman, como su sucesor, usurpando efectivamente al mentor y protector de al-Jabri, el príncipe bin Nayef. A las pocas semanas, al-Jabri fue despedido, mientras que su patrón, bin Nayef, fue puesto bajo arresto domiciliario. Temiendo por su vida, al-Jabri se llevó a su hijo mayor, Khalid, y huyó a Canadá.
Los abogados de Bin Salman han rechazado el caso de al-Jabri por infundado, acusando al exjefe de inteligencia saudí de malversación de unos 3,4 millones de dólares robados de las arcas del estado saudí con el pretexto de financiar algunos programas de seguridad. Los abogados de Al-Jabri, en defensa, dijeron al tribunal que "una revisión de las actividades antiterroristas y de seguridad nacional realizadas con el gobierno de Estados Unidos" puede ser necesaria para demostrar que su cliente no ha malversado fondos estatales innecesariamente.
El desarrollo de la investigación judicial ha preocupado, y no poco, a los funcionarios del gobierno estadounidense.

David Ignacio del Washington Post informa que, en abril de este año, el Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó un documento en un tribunal federal de Massachusetts en el que se describe la estrategia para intervenir en la demanda de al-Jabri contra bin Salman. Según el Departamento de Justicia, el equipo legal de al-Jabri podría sacar a la luz "Información sobre supuestas actividades de seguridad nacional", una situación embarazosa y dañina que el gobierno de Estados Unidos quisiera prevenir.
Según Ignatius, el Departamento de Justicia podría sellar el "secreto de estado“Rara vez utilizado, lo que permite al gobierno de Estados Unidos negarse a revelar información que podría amenazar la seguridad nacional, incluso si lo ordena un tribunal.

Intriga de espías entre Arabia Saudita y Estados Unidos. Departamento de Justicia de Estados Unidos listo para "secretar" los documentos