Aprobado el Documento de Economía y Finanzas para el año 2019. En lo que respecta al sector Defensa, el Gobierno pretende mejorar y hacer más eficiente el sector, dando alta prioridad al tema de la seguridad a través de un eficaz instrumento militar moderno.
Para abordar adecuadamente la complejidad de los rápidos cambios que ya están en marcha, el Gobierno tiene la intención de optimizar y respaldar las capacidades indispensables que deben tener las Fuerzas Armadas, como un paso necesario para poner al país en las mejores condiciones para enfrentar las amenazas modernas y los riesgos de seguridad. Será necesario elaborar una Estrategia general de seguridad nacional que pueda constituir esa piedra angular institucional en la que la Defensa podrá basar sus objetivos y asegurarse de que incluso Italia obtenga su primera "Gran Estrategia".
El Gobierno mantiene su firme compromiso de hacer todo lo posible para garantizar el uso más eficaz y virtuoso de los fondos asignados a la Defensa, así como para garantizar los niveles de financiación necesarios para la modernización de las Fuerzas Armadas, a fin de preservar e incrementar sus capacidades operativas y adaptarlas gradualmente. , la dimensión de nuestro esfuerzo económico-financiero a los compromisos asumidos dentro de la OTAN y la UE.
En particular, a nivel internacional, continuaremos operando en el marco de organizaciones y alianzas tradicionalmente ancladas para la proyección exterior, contribuyendo a las intervenciones necesarias para la protección de los intereses nacionales, prestando la máxima atención a la asignación de los recursos relativos, costos asociados. En este marco, la cooperación seguirá siendo fundamental, tanto en el marco de la estructura de defensa común integrada de la OTAN como en el contexto de la Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD) de la UE. Específicamente, en el contexto de la Cooperación Estructurada Permanente (CEP), Italia tiene la intención de apoyar y mejorar las oportunidades que ofrece el Fondo Europeo de Defensa (FED), que proporciona financiación tanto para la investigación tecnológica como para para el desarrollo de capacidades estratégicas, así como del Programa Europeo de Desarrollo Industrial de Defensa (EDIDP), destinado a apoyar proyectos de cooperación industrial multilateral entre empresas europeas del sector de la defensa.
Además, a pesar de la necesidad imperativa de garantizar la defensa del país, de los espacios euro / atlánticos y la contribución a la gestión de las crisis internacionales, lo que representa el enfoque de la Defensa, basado en experiencias recientes y tendencias futuras, es probable que sí continuará siendo testigo de un aumento cualitativo y cuantitativo en las actividades llevadas a cabo por las Fuerzas Armadas, relacionadas con el desempeño de tareas específicas en circunstancias de calamidad pública y en otros casos de extraordinaria necesidad y urgencia, en apoyo y en competencia con las demás Administraciones del Estado.
Esta tendencia requiere la búsqueda de la máxima sinergia con todos los actores involucrados, a fin de promover y consolidar el concepto de Uso Dual Sistémico de las Fuerzas Armadas - o 'el enfoque preventivo dirigido a obtener un instrumento militar que sea capaz de integrarse mejor con componente civil, tanto para tareas militares como no militares, en apoyo de la comunidad y como contribución a la resiliencia nacional ', sistemáticamente los efectos positivos derivados del uso de las habilidades y capacidades de doble uso ya disponibles para la Defensa. En este sentido, el paradigma multipropósito por diseño, como un nuevo proceso de desarrollo de capacidades militares concebido no exclusivamente para tareas militares, constituirá el principal factor habilitador de este nuevo enfoque. El Gobierno también se comprometerá a seguir impulsando las políticas de innovación y de investigación científica y tecnológica, con la contribución del mundo académico, la industria y el sector privado. En particular, se trabajará para crear e integrar habilidades avanzadas especializadas en el sector industrial, a través de la formación de centros de competencia altamente especializados integrados por universidades / investigación e industria (grandes y pequeñas y medianas empresas), con el fin de promover la transferencia de tecnología y 'innovación en los procesos de producción, adopción y difusión de tecnologías habilitadoras. En consonancia con las necesidades de defensa, seguridad y resiliencia del país, se fomentará, por tanto, la adopción del mencionado polivalente por diseño. En cuanto a la ciberamenaza, factor de alto riesgo para que el país sea aprovechado también como oportunidad de inversión, el Gobierno pretende desarrollar programas de adquisición para acceder a herramientas operativas altamente tecnológicas, con el fin de preservar la protección y resiliencia de los sistemas. y redes estratégicas nacionales.
Asimismo, en el ámbito de la seguridad energética se procurará lograr altas capacidades de resiliencia energética, reducir consumos y necesidades, así como producir y aprovisionar de fuentes eco-sostenibles. Con especial referencia a los sitios de valor estratégico, se examinará la posibilidad de implementar distritos energéticos inteligentes (distritos militares inteligentes), en los que se maximiza el uso del autoconsumo y donde la gestión de los flujos de energía se realiza en tiempo real, en un cauce. seguro de la ciberseguridad, en perfecta simbiosis con el binomio ciberseguridad - seguridad energética.
Además, los esfuerzos deberán continuar para lograr una racionalización del parque de infraestructura militar, eliminando la infraestructura que ya no es necesaria y, cuando sea posible, combinando las que desempeñan funciones similares y promoviendo una distribución progresiva y más equilibrada en todo el territorio nacional, con especial referencia a en el sur y en las áreas de mayor contratación de personal. En este contexto, las soluciones identificadas tendrán que privilegiar, en el proceso de analizar los impactos, los elementos financieros y de gestión al proceder con la enajenación o la mejora de los activos inmobiliarios que ya no son necesarios.
La atención máxima continuará dirigiéndose al personal militar y civil, que representa el recurso fundamental de la Defensa, continuando la acción para salvaguardar la salud y la seguridad, mejorando la condición y la profesionalidad de todas las categorías.
Además, ante el envejecimiento progresivo del personal civil y militar de la Defensa, además de la liberación del giro, sigue siendo fundamental continuar con las nuevas contrataciones.
Finalmente, la cultura de efectividad, eficiencia y ahorro de recursos continuará desarrollándose a través de la implementación de los procedimientos de control de gestión más modernos.
