“Maniobra de lágrimas y sangre” a la espera de la decisión de la UE sobre el Pacto de Estabilidad

(por Francesco Matera) Ayer se celebró una reunión mayoritaria para fijar los límites de la nueva ley de presupuesto, que se caracterizará por la austeridad y la búsqueda del despilfarro. Los recursos disponibles, netos de gastos fijos, son verdaderamente tan limitados que es necesario que el Ejecutivo y el Parlamento sean compactos para intentar sacar adelante únicamente las ayudas a las familias y la reducción de la cuña fiscal. Será, por tanto, una Ley de Presupuesto prudente con la esperanza de que Bruselas suavice su línea intransigente sobre el retorno a las antiguas reglas y, por tanto, a pacto de estabilidad. Las negociaciones acaban de comenzar y deberían conducir a la decisión, a finales de diciembre, de reanudar en enero de 2024 las normas que prevén un déficit perentorio del 3%. (el Pacto había sido suspendido por el Covid).

También intervino en este sentido. Mario Draghi quien en The Economist dijo “caer pasivamente en las viejas reglas fiscales sería el peor resultado posible“. Las reglas, escribe Draghi, deberían ser a la vez rigurosas, para garantizar la credibilidad a mediano plazo, y flexibles, para permitir que los gobiernos reaccionen ante shocks inesperados. Luego precisó que las reglas actuales no son ni lo uno ni lo otro, y conducen a políticas demasiado laxas en los períodos de auge y demasiado rígidas en los períodos de crisis.

Europa debería aplicar el sistema americano donde las inversiones necesarias para objetivos comunes como la lucha contra el cambio climático, la defensa, etc. deberían realizarse a nivel federal y por tanto separadas de los presupuestos de los países miembros.

Volviendo a la Ley de Presupuesto italiana, por ahora sólo se confirma el recorte de la cuña sobre los salarios medio-bajos porque el Tesoro espera la consolidación de los datos económicos, a la espera de la decisión de Eurostat sobre cómo calcular el gasto del Superbonus: el primer año, cuando ¿Se forma cuando se descuenta el crédito fiscal, o año tras año? Si Eurostat confirma que calcula todos los gastos del Superbonus en un solo año, será doloroso porque el déficit programado en 4,596 superará las limitaciones europeas y alcanzará el 6% del PIB.

Las peticiones "emblemáticas" de los partidos, referidas a impuestos, seguridad social, infraestructuras y mucho más, ascienden a unos cuarenta mil millones, mientras que el Gobierno piensa en una maniobra de sólo treinta mil millones (sin embargo, faltarían unos 25 mil millones). Como toda empresa financiera italiana, ésta también será una apuesta inexorable.

¡Suscríbete a nuestro boletín!

“Maniobra de lágrimas y sangre” a la espera de la decisión de la UE sobre el Pacto de Estabilidad

| EVIDENCIA 4 |