Mattarella los probó a todos para evitar el impasse del sistema

(Por Fabrizio Finzi) Ciertamente no será el Quirinale el que obstaculice el nacimiento de un gobierno político y una legislatura. Sobre todo si la alternativa que se presenta es la de unas elecciones en pleno verano u otoño. Más que una alternativa, Sergio Mattarella lee la vuelta a las urnas como un riesgo gravísimo que podría desembocar en una auténtica crisis del sistema si la votación vuelve a proponer más o menos los mismos resultados del 4 de marzo. Es a la luz de estas consideraciones que el presidente tuvo que tomar nota de las dificultades en las negociaciones entre la Lega y el Movimiento Cinco Estrellas y, a regañadientes, conceder más tiempo a Luigi Di Maio y Matteo Salvini. Pensamos en la semana considerando también los compromisos adquiridos por la Liga con su "gente" convocada nuevamente para expresarse en los miradores el próximo sábado y domingo. Un tiempo que evidentemente no es infinito y está cada vez más ligado a los plazos internacionales. A principios de junio, el G7 en Canadá y luego a finales de mes el Consejo Europeo en Bruselas. Para esas fechas debe haber un gobierno. Sin embargo, el presidente de la República corre el riesgo de verse atrapado en una pinza venenosa, entre las glorietas de la Liga Norte en las plazas y la votación en línea en la plataforma de parrilla “Rousseau”. Una situación completamente insólita, o al menos nunca vista en el pasado, que cae en medio de las consultas para la formación del Gobierno. Pero el riesgo de una crisis del sistema es demasiado alto y Mattarella prefiere asumir sobre su persona el peso de las críticas inevitables antes que poner un freno en la rueda de una negociación que parece, a pesar de las dificultades, en marcha. Por otro lado, el jefe de Estado los ha probado todos en estos 70 días, recuerda en Colle. Exploró lo inexplorado, primero probando el camino de centro derecha y luego el del Partido Demócrata, manteniendo siempre en el centro a las Cinco Estrellas, la verdadera piedra angular de esta crisis. También ha lanzado un gobierno de garantía para salvar el Presupuesto de 2019 y dar tiempo a las fuerzas políticas para desarrollar la razonabilidad. Pero nada. Sin saber siquiera el corte del gobierno y el nombre del primer ministro que tenía en mente Mattarella, le cerraron la puerta en la cara. Nunca lo votaremos. Y todos gritando "¡a votar, a votar!". ¿Por qué debería ser el presidente quien cierre las puertas ahora? Es cierto, se observa, Lega y Cinque Stelle se han "rematado". Y con cierto asombro se constata que la aceleración que ayer impresionó - “informaremos a Mattarella de todo”, dijeron - se ha convertido hoy en una auténtica frenada. Salvini y Di Maio aún no están preparados y la cuestión del nombre del primer ministro sigue siendo una dificultad extrema. Ahora hay un acuerdo imprudente entre dos programas que inicialmente eran como el sol y la luna. Los nombres se discutirán más adelante, aseguran todos. Y no será un problema menor. (ENCARGARSE DE)

Mattarella los probó a todos para evitar el impasse del sistema

| ITALIA, PRP Canal |