La última prueba fue un éxito y Rusia tiene nuevos misiles hipersónicos capaces de transportar ojivas nucleares a su disposición. El presidente Vladimir Putin lo anunció con orgullo a la nación indicando que las armas podrían estar operativas el próximo año. Estamos hablando del nuevo sistema de misiles estratégicos, el Avangard, capaz de alcanzar objetivos a muy larga distancia.
La prueba reciente vio al misil partir del suroeste de Rusia para alcanzar un objetivo ubicado en el extremo oriental del país (unos 6000 km). Es un sistema capaz de golpear cualquier punto deseado del mundo sin tener que temer ningún escudo espacial, por eso Putin elogió el arma hace meses: la referencia fue directa al escudo antimisiles estadounidense.
El Avangard es un misil capaz de deslizarse como un planeador entre las diferentes capas de la atmósfera a veinte veces la velocidad del sonido. Otras joyas de Putin son el misil balístico pesado Sarmat y un torpedo nuclear ultrarrápido, llamado Poseidón, que puede ser lanzado por un Mig modificado, el Kinzhal. Pero el buque insignia del nuevo arsenal es sin duda el Avangard probado ayer que alcanza una temperatura exterior en vuelo de dos mil grados. La velocidad y la temperatura muy altas le darían una especie de invisibilidad.
No es casualidad que Putin hablara la semana pasada del riesgo de una guerra nuclear en Europa. Una estrategia de comunicación que la del presidente Putin tiende a subir en las encuestas que lo ven en fuerte declive, luego de haber lanzado la reforma previsional. De hecho, la atención de los medios se centra principalmente en cuestiones de seguridad y defensa.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Moscú también advirtió a Occidente que no interfiera en la cuestión de Ucrania y no esté de acuerdo con las provocaciones de Kiev en curso en el Estrecho de Kerch. El estrecho se vio afectado a finales de noviembre por una intervención de las autoridades rusas que se apoderaron de tres barcos de la armada ucraniana.
En los últimos días, el ministro de Defensa británico, Gavin Williamson, durante una visita a Ucrania, dijo que el Mar Negro no pertenece a Rusia y que Reino Unido enviaría una unidad naval de la armada británica. El Consejo Europeo también decidió recientemente renovar las sanciones a Rusia por incumplimiento de los acuerdos de paz de Minsk.