Es siempre más fuerte en los Estados Unidos pensado para empujar Washington para imponer sanciones a los bancos que hacen negocios con Pyongyang considera c h en el momento en sanciones de la ONU han frenado las ambiciones nucleares de Irán de Corea del Norte.
En las últimas semanas, ya se han dado algunos pasos en esta dirección, en agosto pasado, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a varias personas que trabajaban en el desarrollo de armas de destrucción masiva de Corea del Norte. Las sanciones han afectado a personajes chinos y rusos, acusados de participar en el financiamiento y el desarrollo del programa de armamento de Pyongyang.
La administración Trump ha prometido "aumentar la presión sobre quienes apoyan los programas nucleares y balísticos".
El experto en sanciones Anthony Ruggiero, que ha trabajado en departamentos del tesoro estatal, se distancia de quienes creen que la política de Trump hacia Corea del Norte es similar a la de Obama. Ruggiero señala de hecho. "La administración Trump ha tomado al menos seis medidas distintas contra empresas, personas o bancos chinos, algo que tanto Obama como George W. Bush siempre se han mostrado reacios a hacer".
De acuerdo con Ruggiero No es cierto que Beijing está perdiendo la paciencia con Kim Joung-uno y no está convencido de que Pekín podría inducir a la RPDC a sentarse en la mesa de negociación.
Incluso Tom Malinowski, exjefe de derechos humanos del Departamento de Estado en la administración de Obama, está de acuerdo en que los bancos chinos deben ser sancionados, pero de acuerdo con cuando se declararon en un evento público "se debe tener cuidado para asegurar que las sanciones se dirijan contra aquellas realidades que traen beneficios directos al régimen de Corea del Norte y su programa balístico y nuclear ”. Según Malinowski "No debemos intentar cerrar las comunicaciones entre China y Corea del Norte, porque son estas las que probablemente permitirán un cambio real en la situación coreana".
Según AFP un funcionario de las Naciones Unidas, existe preocupación entre diplomáticos a estas sanciones secundarias, que atentan contra el éxito alcanzado en el Palacio de Cristal también por qué, a pesar de la elevación del nivel de la crisis, después de ' último misil de Kim que voló sobre Japón, las posiciones siguen siendo los mismos: el empuje de Estados Unidos para una mayor firmeza, mientras que otras naciones como Rusia y china, invita al diálogo, evitando provocaciones.