por Andrea Pinto
Muchos milicianos de Hamás arrodillados, semidesnudos y con las manos a la espalda fueron retratados junto a edificios destruidos. Esta es la imagen difundida ayer por los soldados israelíes a los medios de comunicación. El motivo era demostrar cómo los terroristas de Hamás se entregaron entregándose. El lugar donde ocurrió esto fue señalado inicialmente en la zona norte, cerca Jabiliya, donde hay un campo de refugiados ya afectado por varios bombardeos. Daniel Hagari, portavoz de las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel), afirma que las zonas de Jabaliya y Shejaiya (norte de Gaza) son centros de gravedad de los terroristas y explica que allí son identificados, capturados e interrogados.
Fuentes palestinas cuestionan estas imágenes, afirmando que los individuos semidesnudos no son combatientes de Hamás, sino civiles. La demostración plástica de una propaganda que utiliza la comunicación como arma altamente penetrante para influir en la opinión pública. Independientemente de las estrategias comunicativas de los contendientes, la guerra continúa extendiéndose también al sur de la Franja de Gaza en busca de los líderes de Hamás. La idea de inundar los túneles subterráneos de Gaza con agua de mar está siendo evaluada actualmente por los generales israelíes: en este momento el destino de los aproximadamente 140 prisioneros estaría sellado y, por tanto, dedicados al sacrificio por la causa israelí.
La tensión entre la ONU e Israel vuelve a crecer, con el secretario general Antonio Guterres que anuncia la intención de invocar laaplicación del artículo 99 para Gaza, lo que le permitirá señalar la cuestión a la atención del Consejo de Seguridad.
Ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Eli Cohen, condena duramente esta medida, calificándola de peligro para la paz mundial y acusando a Guterres de apoyar a Hamás. Según el Ministerio de Salud palestino, ha habido más de 17.000 víctimas desde el inicio de la guerra. El Secretario de Estado de los EE.UU., Antony blinken, reitera la necesidad de que Israel haga más para proteger a los civiles durante las operaciones militares.
Además, una entrevista en vídeo de una mujer palestina de la Franja se queja de la escasez de alimentos y acusa a Hamás de acaparar ayuda humanitaria. Algunas imágenes muestran un resentimiento creciente, al menos entre una parte de la población, hacia Hamás. Internamente, algunos se preguntan si las condiciones de vida han mejorado o empeorado desde la masacre perpetrada por Hamás el 7 de octubre.
¡Suscríbete a nuestro boletín!