La Asociación Bancaria Italiana anuncia un nuevo Memorándum, en cinco puntos, dedicado a las cuestiones de aquellos que tienen problemas derivados de la elección de hipotecas a tipo variable y del crecimiento de los tipos de interés como consecuencia de las decisiones del BCE.
El ABI indica, de forma sencilla e inmediata, las posibilidades que hoy en día están disponibles en Italia para que las familias reduzcan el impacto de la subida de los tipos de interés en las hipotecas a tipo variable.
En primer lugar, la ABI recomienda que ante los primeros signos de posibles dificultades, el titular de la hipoteca se ponga en contacto con su banco para evaluar posibles soluciones para hacer frente a la subida de los tipos de interés: el banco le proporcionará toda la información útil para comprender las diferentes opciones y para evaluar los impactos por adelantado.
En particular, la ABI señala que el titular de la hipoteca puede:
- acordar con su banco extender la duración de su préstamo;
- solicitar una revisión de otras condiciones contractuales;
- realizar la denominada portabilidad/subrogación de hipotecas, es decir, la posibilidad de transferir el propio préstamo hipotecario sin gastos y costes a otro banco, modificando las relativas condiciones contractuales;
- utilizar el Fondo de Solidaridad para hipotecas de primera vivienda, el denominado "Fondo Gasparrini" que permite suspender el pago de la cuota del préstamo hipotecario para la compra de la vivienda habitual, hasta en 18 meses, prorrogando el plan de amortización por el plazo de suspensión , en caso de eventos como, por ejemplo, la pérdida de un trabajo, una reducción de la jornada laboral (el llamado fondo de despido) o una reducción de la facturación para los trabajadores autónomos;
- convertir la hipoteca de una tasa variable a una tasa fija. La ley de presupuestos para 2023 ha establecido que los bancos están obligados a transformar, en caso de solicitud del prestatario que no se atrase en las cuotas, por préstamos de hasta 200.000 euros y con el ISEE del prestatario que no debe superar los 35.000 euros .